29 de abril de 2007

Dios salve a la monarquía


Es curioso que en el mundo competitivo y pragmático en el que vivimos, sigan existiendo todavía casos tan anacrónicos como las monarquías existentes aún en el mundo. Señores y señoras que gracias a su estirpe divina o a que sus antepasados eran los más brutos y dominadores en épocas pretéritas, se agarran como garrapatas a una serie de privilegios que ofenden al sentido común.

Dejando de lado la irresponsabilidad personal de todos ellos de renunciar por ética y por lógica a tales aberraciones sucesorias, lo único que demuestran es la parasitaria forma de vida a la cual se han acostumbrado y de la cual se vanaglorian. Sin embargo, lo más esperpéntico, es la aberrante permisividad que manifiesta la sociedad actual del siglo XXI, otorgándoles una serie de prebendas y exenciones que rayan con la simple enajenación. Y no contentos con permitirles una vida regalada y un paraíso artificial en el cual se sientan a salvo del mundanal ruido, jaleamos como imbéciles babeantes el alumbramiento de cualquier vástago que traigan al mundo. Porque una cosa no se les puede negar, a pesar de tener ciertos riesgos de salud por el elevado nivel de consanguinidad, son verdaderos campeones en el campo de la fertilidad. Una buena dosis de ocio, acompañada de unas ganas locas de aumentar la familia, les hace los principales factores de la recuperación de la natalidad en el país.

Ante el nuevo nacimiento, del cual se verterán ríos de tinta y felicitaciones, sólo me queda añadir una cosa: Salud y república.

12 comentarios:

Bernardo dijo...

Caray, Baba, estoy especialmente conmovido con su comentarios por dos motivos.
El primero porque, una vez más, coincidimos en la temática. Empiezo a pensar en una suerte de telepatía intelectual. Por fortuna, la forma de abordar la temática, en la que coincido por completo con usted, es original en ambos casos.
Segundo, por constatar que no soy la única persona en el munod que no hace puente. Es más, para mi oprobio y desprestigio social, mañana -bueno, hoy- trabajo, lo que me sitúa a la altura de los más parias de la tierra.
Saludos

Baba O'Riley dijo...

Le prometo, amigo Bernardo que no existe ni un mínimo conato de plagio, aunque si lo hubiera, no se me ocurre nadie mejor para hacerlo. Creo que usted es más irónico y más cortés en su comentario.
En cuanto a lo de trabajar el puente, hay que hacer lo que sea necesario para que gracias a mis impuestos, nuestra familia real pueda tener todas las comodidades que merece. Supongo que usted debe de estar igual de comprometido.

Anónimo dijo...

Creían estar solos en la tierra... yo tambien trabajo o lo aparento!

Salu2

Armando dijo...

A pesar de q quitarlos de enmedio traería cola -habría que repensar que somos y tal como está el patio...-, ¡qué coño! ¡Yo también soy republicano!

El Perdíu dijo...

Algún día coincidiremos en algo. Fíjese, cuando usted habla de "dominadores en épocas pretéritas, se agarran como garrapatas a una serie de privilegios que ofenden al sentido común", yo pienso en el cupo vasco o en la insolidaridad de fundamentar el autogobierno sobre derechos históricos.
Hay muchas cosas anacrónicas en nuestra sociedad política (el propio modelo de reprsentación está basado en la idea de la soberanía, que no es lo más moderno que digamos), ficcions que nos son útiles. Y la monarquía lo es. No sé porqué nos ponemos todos tan liberales para hablar del gasto publico de la monarquía cuando creo que es una inversión muy rentable... y no hablamos de la cantidad de dinero que se tira en bobadas desde los poderes públicos

Baba O'Riley dijo...

Mafalda, mal de muchos consuelo de tontos...dicen.
Armando, me entusiasma que tengamos un punto de vista parecido, lo valoro por encima de otras muchas consideraciones .
"Realista" Perdiu, hoy no será ese día. El mismo concepto de monarquía ofende en si mismo cualquier atisbo de razonamiento. Para alguien que basa su origen ideológico en la consecución de los logros a partir de su intelecto y esfuerzo, intentar defender los derechos de la realeza, es cuando menos una contradicción pasmosa. Pero en fin, en peores ruedos le he visto torear.
Evidentemente que existen otros desfases igual de flagrantes, pero eso no varia ni un ápice la consecuencia de que no podemos mantener ni un minuto más algo tan obsoleto, injusto e innecesario.

El Perdíu dijo...

Baba, no todo es racional. No olvide que el sueño de la razón produce monstruos. Hay instituciones que deben ser juzgadas, creo yo, por lo que rinden, y no por otros temas. Es decir, si usted me contrapone un satrapía como la marroquí o una república, pues sin duda república; ahora bien, si la alternativa es entre monarquia constitucional y república, no tengo dudas. Monarquía...
Y eso, por no hablar del pavor que nos da a algunos la idea de una República en España. No hay más que ver el primer artículo de la última: "República de Trabajadores", ¡toma ya!

Tanhäuser dijo...

Como dirían Els Pets, "Jo vull ser rei".
Salud

Baba O'Riley dijo...

"ser per collons cap de l´Estat
tenir-ho tot fet
només per ser fill de papà"

Anónimo dijo...

Perdiu, ahora me defiende la Monarquía? debe ser que le gusta llevanos la contraria porque usted es republicano convencido, o eso creía.

El Perdíu dijo...

Mafalda, no se crea. Convencido soy pocas cosas. Pero me parece que una monarquía constitucional tiene algunas ventajas que no podemos desconocer. Y en un país cainita como este, ¿Se sentiría usted cómoda con Aznar de jefe de Estado? ¿Me sentiría yo cómodo con Rubalcaba en la más alta magistratura?
Es fácil hacer demagogia sobre instituciones como la monarquía. Pero creo que es más eficaz preguntarnos por su utilidad. ¿No cree?

Charlie Jiménez dijo...

Totalmente de acuerdo contigo. ¡¡¡Viva la III República!!! Pero una observación nada más: en este país, no sé si por tener los políticos que nos merecemos, la cagamos siempre con
un voto en la mano; ¿te imaginas al sr. Aznar, Zapatero, Rajoy, Maragall, Ibarreche o Carod siendo Presidente de la República y el 1º de los españoles? Para pedir el destierro voluntario, vamos.

Un saludo.